martes 24 Mayo 2011

Martes de la V Semana de Pascua

Evangelio según San Juan 14,27-31.

Les dejo la paz, les doy mi paz, pero no como la da el mundo. ¡ No se inquieten ni teman !
Me han oído decir: 'Me voy y volveré a ustedes'. Si me amaran, se alegrarían de que vuelva junto al Padre, porque el Padre es más grande que yo.
Les he dicho esto antes que suceda, para que cuando se cumpla, ustedes crean.
Ya no hablaré mucho más con ustedes, porque está por llegar el Príncipe de este mundo: él nada puede hacer contra mí,
pero es necesario que el mundo sepa que yo amo al Padre y obro como él me ha ordenado. Levántense, salgamos de aquí.


Extraído de la Biblia, Libro del Pueblo de Dios.

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Paz, Señor. Tú eres la Paz. No como la da el mundo. Eres la Paz que reconforta el alma, la paz del amor, la paz que nos hace hermanos, la que nos lleva al Padre, la que nos une en el Espíritu. Eres la paz que acoge, que da calor, la que hace desaparecer todo temor. La cruz se vuelve liviana y agradable y el Calvario, una ofrenda gozosa a mi Amado. Lo que me lleva aTï, es el camino gozoso, no importan las espinas. Aún en el dolor está la Paz del Señor, porque nos da la paciencia y la fortaleza para sobrellevarlo. Y la alegría de ser dignos de acompañarlo en su Pasión. Paz, Señor, Gracias por tu paz.